Un correcto mantenimiento de los cuchillos de cocina tiene un doble beneficio: estético y funcional.
En cualquier cocina, ya sea particular o profesional, aunque especialmente en estas últimas, la imagen es fundamental. Unos cuchillos bien cuidados pueden marcar la diferencia en este aspecto, ya que reflejan una mayor atención al detalle, nivel de higiene y control de la calidad. Por el contrario, una cocina en las que se vean cuchillos desgastados y sin brillo transmitirá una sensación mucho más negativa.
En cuanto al aspecto funcional, un buen mantenimiento de los cuchillos conlleva múltiples beneficios: una vida útil más larga y un corte más preciso, eficiente y seguro; consiguiendo mejores resultados, un ahorro de tiempo y la reducción de las posibilidades de accidentes.
Si quieres disfrutar también de las ventajas de unos cuchillos de cocina bien cuidados, toma nota de los siguientes consejos.
Los afilados de cuchillos son la piedra angular de un buen mantenimiento. El afilado, además de devolverles su aspecto y brillo original, permite alargar su vida útil evitando tener que comprar nuevos cuchillos antes de tiempo, con el ahorro que ello conlleva.
Un servicio profesional de afilado es capaz de dejar los cuchillos como nuevos, con un corte tan preciso y eficiente como el del primer día, evitando así los efectos del desgaste
Siempre que puedas, evita lavar los cuchillos que no pertenezcan a la cubertería de mesa en el lavavajillas. La razón es que el choque con otros cuchillos y cubiertos termina produciendo arañazos en sus hojas y desgastándolas.
Además, el agua caliente y las sales de los detergentes también estropean los cuchillos y sus mangos, especialmente aquellos de madera. Lo recomendable es lavarlos manualmente y secarlos con un paño suave.
Las tablas de corte, además de cuidar las superficies de trabajo, también protegen a los cuchillos absorbiendo el impacto que se produce en cada corte. Si en lugar de en una tabla, se realiza sobre la encimera u otra superficie dura, el desgaste de la hoja se producirá de una manera mucho más acelerada.
Aunque en el ámbito doméstico son comunes las tablas de madera, éstas no están permitidas en cocinas profesionales, donde las más recomendables son las de polipropileno.
Los cuchillos especiales que no formen parte de la cubertería de mesa no deben ser guardados en un cajón donde estén en continuo contacto y roce con otros cuchillos, ya que esta manera se producirán arañazos y un mayor desgaste en sus hojas.
Las alternativas son muchas y diversas. Las más frecuentes son los tacos de madera en los que se introducen los cuchillos y donde cada uno tiene un espacio individual. Otras opciones son los estuches para cuchillos o los soportes metálicos imantados.
