13 Nov
13Nov

Tal vez no has oído hablar de la tecnología RFID pero sí que la has visto funcionar más de una vez aunque desconocieras exactamente de qué se trata. La tecnología RFID está presente en muchas tiendas a las que acudimos normalmente y vamos a verlo con un ejemplo en qué la percibimos.Vas a salir de una tienda y de repente suena la alarma. 

Te quedas paralizado y  el guardia de seguridad te pregunta si llevas alguna etiqueta antirrobo en tus prendas. Al comprobar una etiqueta de tu chaqueta o jersey se deshace inmediatamente el entuerto al ver una etiqueta, normalmente un poco más grande y gruesa de lo normal, a la que se culpa.Se trata de una etiqueta que encierra en su interior tecnología RFID y que normalmente está acompañada de indicaciones de cortarla, pero que a veces pasamos por alto porque no nos fijamos. 

Esta tecnología está conectada a los sistemas antirrobo y cuando salimos de un establecimiento con una etiqueta que no ha sido desconectada debidamente, se activan.


Etiquetas que son más que un sistema antirrobo

Empresas como Tag Ingenieros que se encargan de dotar a negocios de la tecnología RFID saben que este tipo de etiquetas son mucho más que un sistema antirrobo. Pueden encerrar en su interior mucha información que permite que, por ejemplo, el dueño de un establecimiento sepa en todo momento dónde está la prenda (almacén, punto de venta e incluso sección) y la cantidad de prendas en el inventario a tiempo real. 

La tecnología RFID ha revolucionado la manera de hacer inventarios en los comercios. Desde el mismo momento en que una caja entra en el almacén y pasa por un arco detector de estas tarjetas, los productos que hay en dicha caja pasan a formar parte del inventario. 

Pero, además, se puede añadir información que nos diga exactamente en dónde queda almacenado el producto. Si este sale hacia uno de los puntos de venta, se sabrá exactamente a dónde ha llegado. Se registran salidas de almacén y entradas en tienda para evitar pérdidas de mercancía o, cuando hay diferentes puntos de venta, no saber en qué establecimiento está cada cosa. Esto también facilita el localizar un artículo en cualquier punto de venta y poder solicitar su envío a otro lugar.

e suena cuando en algún establecimiento miran en el ordenador, te dicen que tienen una unidad del artículo que te gusta en otra de sus tiendas y pulsando un botón la solicitan para que llegue al establecimiento y puedas recogerla en otro momento? Como ves, has oído hablar de la tecnología RFID aunque no supieras su nombre y ahora ya conoces un poco más sobre todas las posibilidades que ofrece.

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