14 Jan
14Jan

Las bajas temperaturas afectan de manera directa a algunos componentes de los coches. El motor y la batería se resienten especialmente en los días más fríos, pudiendo verse su rendimiento notablemente reducido si no se toman las precauciones oportunas.

A primera hora de la mañana, durante las horas más frías del día, es frecuente que al coche le cueste más trabajo arrancar, especialmente si ha pasado la noche a la intemperie.

Si te has encontrado en esta situación alguna vez, hemos consultado a los especialistas de este taller mecánico en Sevilla, quienes te dan los siguientes consejos para arrancar tu coche en días de frío. ¡Toma nota!

Calentar la batería
La batería es muy sensible a las bajas temperaturas. Una forma de solucionar este problema es dándole calor antes de arrancar el vehículo. Para ello, puedes calentar una bolsa de agua y ponerla sobre la batería hasta que su temperatura aumente lo suficiente.

Si no tienes tiempo por las mañanas de abrir el capó y hacer esta operación esperando a que la batería se caliente, otra alternativa es cubrir la batería por la noche. A modo de funda, puedes usar una manta o cualquier tejido grueso capaz de conservar la temperatura. 

De esa forma, cuando llegue la hora de arrancar por la mañana, a la batería de costará menos trabajo hacerlo. Eso sí, no te olvides de quitar la funda antes de arrancar o podrás provocar una avería grave.

Quitar la calefacción
Apaga la calefacción, la radio, las luces y cualquier otro aparato eléctrico que pueda haber conectado. De este modo, permitirás que la batería utilice el 100% de su capacidad disponible exclusivamente para arrancar el vehículo.

Pisar el embrague
En muchos modelos de coche es un requisito necesario pisar el embrague para poder arrancar el motor. De cualquier manera, si no es el caso del tuyo, se trata de una práctica recomendable ya que, al pisar el pedal del embrague, se desacopla la transmisión, consiguiendo así que tanto la batería como el motor de arranque requieran menos esfuerzo.

No fatigar la batería
Si tras más de cuatro segundos con la llave girada el coche sigue sin arrancar, no insistas. La batería entrega su energía en los primeros segundos, tras los que empieza a perder fuerza.

Por eso, para aprovechar esta energía, si a los cuatro segundos no ha conseguido arrancar, gira de nuevo la llave y déjala descansar unos segundos para que se recupere antes de volver a intentarlo.

Deja el coche a resguardo
No todo el mundo tiene la suerte de disponer de una plaza de garaje. En caso de tener que dejar el coche en la calle, trata de buscar un lugar lo más resguardado posible. La diferencia entre estacionarlo en un descampado y o hacerlo en un lugar más resguardado entre edificios puede ser decisiva a la hora de arrancar el vehículo por la mañana.

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